Viaja al pasado con Maldy
Es imposible no hablar de Maldy cuando se trata de la historia del movimiento urbano. Con su presencia como miembro del icónico dúo Plan B, se consolidó como una de las figuras emblemáticas del reggaetón. Firmó su estrellato global con éxitos que marcaron la vida de toda una generación, y que, aunque pasen los años, son hitos atemporales en su carrera que jamás serán olvidados. Aún con toda una lista prometedora de éxitos, la estrella puertorriqueña sigue sumando triunfos distinguidos a su trayectoria. Su versatilidad, compromiso y pasión no nos dejan de sorprender.
Maldy ha presentado su más reciente álbum de estudio: Aquí Se Vino a Perrear. Se trata de un álbum que busca enaltecer su legado como solista dentro del movimiento de la música urbana, además de recordar con orgullo el camino que lo ha llevado a ser uno de los grandes exponentes dentro del género. “Es un disco que es muy importante para mí, para mi carrera. Si ves la carátula, es lo de antes: cuando se vendían los discos físicos, el tú a tú con el fanático, cuando le dabas autógrafos, tirabafos fotos con ellos. Era el formato de antes. También están los posters de antes, donde llegué a colaborar. También están los discos que me gustaba escuchar, de Daddy Yankee, Nicky Jam y más”, explica Maldy a ROLLING STONE en Español. “También está la cajita de Plan B. Están los recuerdos, aunque ya cerré esa etapa como tal”.
A lo largo de Aquí Se Vino a Perrear, Maldy nos cuenta su historia de vida. La estrella, a través de videoclips, nos comparte los inicios de su vida, revelando sus primeros sueños y aspiraciones de convertirse en cantante. Vemos al pequeño puertorriqueño de tan solo 10 años, lleno de ilusión, cantando frente al espejo mientras imaginaba una multitud coreando sus canciones y su nombre. Más adelante, la narrativa avanza hacia el origen de Chencho y Maldy, mostrando cómo dos soñadores comenzaron cantando en karaokes, sin imaginar que algún día se convertirían en leyendas del movimiento urbano, en el icónico dúo Plan B. Al final, estos clips cierran una etapa en la carrera de Maldy para dar comienzo a una nueva historia llena de retos y sueños por cumplir. Ahora, desde su individualidad.
“Cierro una etapa y empieza otra con el álbum de Aquí Se Vino a Perrear. Es muy especial para mí, lo di todo. Fueron nueve meses de preparación. Tuve que parar los shows y todo. Me enfoqué y fue una disciplina grande. Todo estuvo bien pensado, cada tema para cada artista. Es un disco bien completo, de colección”, asegura.
El álbum es un acercamiento real y honesto de Maldy: quién es, cómo se formó, el lugar que lo vio crecer, la esencia de lo antaño, los sonidos contemporáneos que hoy lo acompañan, Puerto Rico como un lugar de cultura, tradición y respeto para el movimiento. Al final, es un guiño hacia la nostalgia con la que tuvo que lidiar el artista, ya que se trata de un viaje por el tiempo a aquellos años dorados que retratan su camino. “Es bien dedicado a Puerto Rico y a las raíces donde surgió el reggaetón. Me encantó el concepto”, dice. “Trabajé bien con la nostalgia. Solo quise contar mi historia y combinarla con la música que es la esencia de nosotros. Quise contar mi historia porque hay mucha gente que no se la sabe, de dónde son mis comienzos y cuáles fueron mis deseos”.

Y es que con la gran trayectoria con la que cuenta Maldy uno creería que domina cada área artística, que los riesgos sonoros ya quedaron en el pasado. Sin embargo, en Aquí Se Vino a Perrear, el puertorriqueño acepta un reto que lo saca de su zona de confort: por primera vez en su carrera, se atreve a incursionar en un género que nunca antes había explorado, el trap. Añade una nueva propuesta a su proyecto, extendiendo su imaginario sonoro de una forma que lo pone siempre a la vanguardia de la industria. Además, también logra montar una cumbia con instrumentos en vivo. “Me sentí bien en hacerlo. Estuve bien enfocado. Fue bueno compartir con todos esos compositores. Se logró, gracias a Dios”, dice.
“Yo soy una persona bien versátil, a quien le gusta experimentar. Me gusta usar mi voz en trap, corridos, bachata, lo que sea que pongan en la mesa. Fue un reto el trap que hice porque es un estilo diferente en cuestión del time. Sin embargo, me dijeron que me atreviera porque confiaban en mí e hicimos ‘Legendary’. Lo logramos. Ni me creía cómo quedó todo”.
El disco también presenta colaboraciones que fusionan la vieja escuela con la nueva. Yandel, Zion, Ryan Castro, Jory Boy, Dalex y Lenny Tavárez son solo algunos de los nombres que trabajaron de la mano de Maldy para la creación de este álbum. “Hemos aprendido mutuamente. Compartí mucho con Ryan Castro y Lenny Tavárez en el estudio, también con Yandel. Tuve el honor de compartir demasiado con todos los que me acompañaron en este álbum”, dice.
La evolución artística de Maldy es evidente e innegable. El puertorriqueño ha crecido de la mano del género urbano, por lo que se ha caracterizado como una de las figuras más imprescindibles del mismo. Las generaciones nuevas, que están llegando para crear un cambio y legado contundente, lo toman como un referente clave a seguir, que sin duda ya ha dejado huella en la historia de la escena urbana. “Hemos evolucionado bastante. Me encanta lo que hace Bad Bunny, lo que hace Rauw. Todos estos artistas han hecho su labor y trabajo como es. Antes no veías a estos artistas que bailaban, pero hoy en día se ve eso. Es un toque bien grande para los artistas, como Rauw que hace un espectáculo enorme. También Bad Bunny, que ha hecho cosas bien grandes para el género. Me encanta lo que está haciendo en Puerto Rico”, dice. “La evolución ha sido bien grande y para bien”.
Y agrega: “El género va para largo, es de mucho tiempo. Saldrán muchos artistas nuevos, generaciones nuevas. Lo veo bastante bien. Me gustaría colaborar con Omar Courtz, Dei V y De La Rose”.

Por ahora, Maldy tiene planes muy grandes y ambiciosos. El artista puertorriqueño proyecta debutar en la actuación más pronto de lo que esperamos. “Me encantaría actuar. Quiero hacer películas, novelas, series, de todo. De drama o acción. Estamos hablando para ver si hago una aparición en la próxima temporada de Sin senos no hay paraíso”, confiesa. Sin embargo, sus planes actorales no se interponen en su pasión por la música. Un nuevo campamento está en sus planes a futuro para crear un nuevo álbum, que tendrá por nombre Donde Sea La Prendo. Además, su lado como productor también será una prioridad para crecer el proyecto de su hijo. Se trata de un legado que parece no tendrá fin.