Hay algo que queda indiscutiblemente claro cuando Danna entra en la conversación: es la reina de la reinvención. La estrella del pop ha recorrido un largo —muy largo— camino artístico, explorando diversas facetas brillantes de su talento: canto, baile, modelaje, teatro y actuación. Sin embargo, hay una en particular que logra cautivarnos con un torbellino de emociones, sentimientos y vivencias: su música. En ella se entrelazan la alegría, el dolor, el éxtasis, la tristeza, el empoderamiento, el amor, la ilusión, la rebeldía, la reflexión y la introspección… entre muchas más. Ahora, estamos por conocer su lado más intrépido, desafiante y sensual. Le damos la bienvenida a la era más HOT de Danna.
Con el lanzamiento de su nuevo sencillo ‘Khe Calor’, la cantante mexicana explora un lado marcado por el empoderamiento femenino, la sensualidad, la libertad creativa y una estética pop que grita el brillo eminente que provoca su llegada. “Yo quería hacer algo muy diferente a lo que estamos acostumbrados hoy en día en la industria. Estaba cansada de ver lo mismo. Quería que la gente descubriera todo poco a poco. No sabían lo que iban a escuchar ni ver”, comparte en exclusiva a ROLLING STONE en Español.
Con una total libertad creativa en sus manos, Danna se arriesgó a crear desde lo conocido. Por más contradictorio que suene, la artista nos está entregando un proyecto muy lejano a lo que habíamos contemplado de ella, pero que a la vez da un guiño a su génesis: la actuación. El video oficial de ‘Khe Calor’ da un giro inesperado y nos presenta un camino disruptivo a lo que comúnmente es una canción de verano, es más, es todo lo contrario a la playa, sol y arena. La cantante mexicana nos entrega una novela pop contemporánea, muy estéticamente arraigada a elementos de la cultura mexicana, donde la pasión, el amor y el exceso se fusionan.
“Fue muy chistoso porque desde un principio queríamos traer una sátira. No es hacer lo obvio, porque, por ejemplo, cuando salió el proyecto de Karol G me pareció muy simpático. Para mí, las novelas nos criaron a toda Latinoamérica, en su momento, al mundo en general. Sé que en Europa también se han visto mis novelas. Siento que había algo que estaba dejando a un lado, como olvidado”, revela. “Me pregunté cómo haría una novela actualmente, porque también me han ofrecido un montón de novelas. Y aunque no voy a regresar a la televisión, me pregunté: “¿Cómo lo haría mi propia novela?” Obvio siempre a mi estilo: traer la moda, traer a una directora que me fascina su trabajo y hacer ‘Khe Calor’”.
Y complementa: “Obvio pudimos hacer algo súper básico: ir a la playa y con el calor ya estaba, pero iba a ser lo más obvio. Yo quería generar mucha intriga sobre qué trataba, desde el sonido, la visión y los personajes. Además, grabamos todo en film; ese es mi capricho más grande en la vida y nos gastamos 13 rollos. Fueron dos días, 30 escenas, nueve cambios de vestuario y una película. Esto es un placer para mí como creativa, directora y artista. Nos dimos cuenta que todos estábamos cumpliendo un sueño y una visión con este filme. Great minds think alike. Criarnos con telenovelas es el dramatismo que necesitábamos. Como popstar, siempre trato de dar más”.
Esta es la historia de un pueblo que es víctima de una terrorífica sequía, pero no por falta de agua, sino de emociones. Danna ya no sufre de amor, domina el juego con una valentía y una sensualidad inigualable; sin embargo, esto trae desdicha a los pueblerinos, ya que solo basta una lágrima suya para traer lluvia. El anhelo de que la mexicana sea desdichada para que pueda vivir en un eterno llanto crece cada día. Cuando decide llorar, por placer y no por sentimentalismo, el cielo se abre y la mágnifica transformación artística y personal de Danna comienza a esclarecer las incógnitas que había planteado a lo largo de los meses. “Era una ansiedad, sobre la telenovela, el tráiler, la canción, todo. Todo esto cobra sentido al momento que ves el video”, dice.
El videoclip nos recuerda algunas de las telenovelas mexicanas más invaluables de todos los tiempos. Es un guiño al pasado, un abrazo a las raíces actorales con las que creció la intérprete, ahora con un giro que deja en claro que ella tiene las riendas de su arte, nombre y camino. “Trato de entrar al mundo de grandes actrices, como María Félix. Son actrices y artistas que marcaron la vida de muchos, incluida la mía”, reflexiona. “También recuerdo la icónica novela de Fuego en la Sangre, que vi de niña. Ahí traje a El Mali para que la hiciera de Eduardo Yáñez como el panadero. También está Mich Duval, quien, fun fact, fue mi primer novio a los seis años [Risas]. Esto es un placer muy grande”.
Sin duda, Danna pensó meticulosamente en cada uno de los detalles que ahora conforman su visionario magistral como artista. Desde hace unos meses, el imaginario de la mexicana se centra en un color en específico: el amarillo. Este color está presente en todos lados y cualquier contexto en el que Danna esté presente. Aunque parece casualidad, es la mente maestra de Danna la que está detrás de todo esto. “El color amarillo respresenta mucho; es la engergía de la canción. ‘Khe Calor’ es un universo completo. Esto me enorgullece completamente”, dice. “Fue un dolor de cabeza, pero lo logramos. Sé que vivimos en un mundo aesthetic, pero me empecé a deprimir bastante con la paleta de colores en tonos gris que teníamos. El mundo tiene mucho color. Pasar de Childstar a ‘Khe Calor’ es esto. Todo a mi alrededor cobró sentido. Todo es amarillo. Es un color que visioné. Me parece brutal”.
El tema toma inspiración de un sample icónico de los años 90: la canción ‘Toma que toma’. Más que un guiño a una melodía que marcó a toda una generación, este elemento conecta profundamente con la esencia de Danna. Para ella, representa un recuerdo entrañable de su infancia, un fragmento sonoro que abraza con cariño y que ahora reinterpreta desde una mirada personal y artística. “Es un sample tan mítico y de alto impacto en muchas generaciones. Para mí, es de mis canciones favoritas de niña. Yo te bailaba esto cuando estaba chiquita”, dice. “Es juntar a muchas generaciones, pero también transformar una canción que en su momento dije que era bastante diferente”.
Pero esta historia aún guarda una sorpresa: la artista revive su nombre actoral para dar vida a un personaje simbólico y profundamente entrañable. Danna Paola reaparece tras un largo silencio, desde que la propia Danna —en su faceta musical— se despidió de ella durante la presentación de su álbum Childstar. El cambio de nombre artístico fue objeto de críticas y cuestionamientos, pero también se convirtió en un acto de poder: el de la reinvención, que, como se mencionó al inicio, la artista lo domina a la perfección. Le permitió abrazar la oscuridad que había cargado durante años y transformarla en arte. Con el regreso de Danna Paola en ‘Khe Calor’, surgen nuevas preguntas: ¿Ha vuelto para quedarse?
“Es un poco de la burla y la sátira de todo lo que ha pasado. Me parece muy cagado jugar con eso, con la narrativa de lo que se dice afuera, con los medios y con el hate. Todo con el fin de convertirlo en algo artístico. Danna Paola soy yo, es mi nombre, la actriz y la cantante. Hoy es esta nueva personalidad, porque tengo múltiples como artista”, asegura. “‘Khe Calor’ me retó creativamente, desde la manera de interpretar, escribir y decir. Esto fue algo nuevo que me sacó de mi zona de confort, que afuera también es diferente. Yo no me pongo límites creativos, al contrario. Hoy puedo hacer y crear lo que sea que se me ocurra. El camino del artista se trata de alimentar al artista interno”.
Bajo la presentación de esta nueva era, Danna esclarece cualquier duda, si es que aún quedaba alguna: “Yo no soy la actriz que canta, yo soy la cantante que actúa. Hoy lo confirmo más”, dice con una voz firme y decisiva. “Tampoco me peleo con ninguna de las dos. Ahora estoy muy cómoda, en un descubrimiento artístico, poderoso y de seguridad, donde sé quién soy como artista. Estoy construyendo algo muy lindo con este nuevo material. Es como nadar agusto en el oleaje que hay”.
